Kamen Rider, 50 años del motorista enmascarado.
Este año uno de los íconos de la cultura pop del Japón cumplió 50 años, una formula que se mantiene siempre actual y que cada vez conquista a más generaciones.
Al hablar de franquicias longevas actualmente en en el mundo de la cultura pop se nos viene a la cabeza: Star Trek (1966), Doctor Who (1963), Ultraman (1966), entre otras. hace poco días Japón celebraba un año más de uno de sus hijos más ilustres en estas instancias: Kamen Rider , llegando a los 50 años.
Kamen Rider o el Motorista (Jinete) Enmascarado es obra del mangaka Shotaro Ishinomori (1938-1998) creador de muchas obras del genero Tokusatsu, Manga y Animé Japonés entre los que sobresalen: Super Sentai (inspiración de Power Rangers) y de Cyborg 009. Ishinomori perdura como una figura importante, aprendiz cercano del gran Ozamu Tesuka con el que cual trabajó durante años.
La serie se considera uno de los pilares del Tokusatsu, genero el cual se caracteriza por el uso de efectos especiales (al principio de tipo prácticos, hoy con ayuda digital), la premisa de la serie considera a un ser redimido, la mayoría de las veces bajo el manto de la maldad pero que se revela a ello para ir en busca de su humanidad arrebatada.
Analizando el argumento, este héroe creado como arma de maldad busca la expiación protegiendo al mundo que fue destinado a destruir. La primera temporada (1971) nos muestra a Takeshi Hongo quien es recluido por la organización terrorista Shocker quienes buscan crear un ser de destrucción, este hombre escapa a su desafortunado destino a tiempo antes de su completa construcción, Hongo ahora convertido en un nuevo ser ahora busca destruir a quienes lo crearon para restaurar la paz que utiliza su motocicleta como eterno símbolo y medio de transporte.
Avanzando la serie este Rider, los cuales todos tienen aspecto de insecto, va encontrándose con otros Kamen Riders que pasan de ser enemigos a ser compañeros en la lucha, en la mayoría de las veces.
Esta franquicia, como cualquier otra, crece en popularidad en base a la venta de productos ligados a la serie: juguetes, ropa, entre otros. Por lo que las series van avanzando con el tiempo y la tecnología ofreciendo más oportunidades de expandir la historia y creando un sinnúmero de armas y dispositivos basados en cada personaje.
Si bien son diversas las temáticas todas tienen un foco en común: la entrega desinteresada de su propia existencia para la sobrevivencia de la humanidad. El héroe tiene sobre él la carga de ser un humano con capacidades más allá de lo racional y con ello la siempre búsqueda del bien común, aunque eso llega a topar con alguna intención que tenga el héroe en su vida.
El camino de Kamen Rider cumple 50 años y tiene muchas más historias que contar, no renuncia a su formula y a su tradición (muy arraigada en el colectivo popular japonés). Una historia que es contada una y otra vez, como un verdadero mito, uno que es invencible ante la más grande de las desgracias y firme como el sentimiento de la gente que los inspira a vencer toda adversidad.